Este lugar me viene perfecto, con wi-fi, recepción 24 horas y aire acondicionado. En mi primera estancia, el personal me ayudó con las maletas, algo que recuerdo con mucho cariño. Lo recomiendo para unas vacaciones.

El personal fue increíblemente amable y me ayudaron a organizar mis excursiones, lo que hizo que nuestra estancia fuera más fácil. La habitación tenía una vista hermosa de la Avenida y toda la ciudad se sentía a un paso.

Mojos de platos y tazas resonaban tan temprano que era imposible disfrutarlo. Además, esperaba que me ofrecieran un gesto especial por las incomodidades, pero parece que aquí eso no es prioridad. La habitación tenía olor a viejo y, la alfombra, por favor, no entiendo cómo aceptan esto.

El personal de recepción fue muy amable y atento.

Me asignaron una habitación oscura con una pequeña ventana que daba a un patio. La falta de luz no fue fácil de sobrellevar y el olor a humedad era desagradable. Además, el desayuno era bastante limitado, no había muchas opciones, lo cual fue decepcionante para empezar el día.

El personal fue extremadamente atento y me ayudó con todas mis consultas.

El baño era demasiado pequeño y la puerta del armario no se podía abrir completamente debido a la mesita de noche.

La correa de la persiana se rompió, pero repararon rápido el inconveniente.

Buena conexión Wi-Fi y el personal te ayuda con el equipaje. A mejorar limpieza.

Una gran experiencia en Lisboa!

Un hotel acogedor con habitaciones cómodas y un personal increíble. Luís en recepción nos ayudó mucho y su simpatía marcó la diferencia. La ubicación es perfecta, cerca del metro y de tiendas de lujo. Ideal para quienes solo necesitan un lugar donde descansar. No te pierdas el desayuno.

la ubicación es excelente en un barrio agradable cerca del transporte. la limpieza del hotel es notable y la atención del personal es muy amable, especialmente la recepcionista de día que nos ayudó mucho.

el desayuno podría mejorarse un poco 😅.

La decoración del hotel tiene un encanto vintage que realmente me hizo sentir conectada con la historia de Lisboa. Además, el acceso al metro estaba muy cerca, facilitando mi desplazamiento por la ciudad con gran comodidad.

Mejorar el aislamiento acústico sería útil.

La ubicación es perfecta, justo en Avenida Liberdade, con acceso fácil al metro. La habitación tiene un olor a humedad que se nota al entrar. Las camas son cómodas. El desayuno es bastante básico, solo lo justo para empezar el día.

El hotel tiene una buena ubicación y ofrece un precio razonable. La habitación que tuvimos contaba con vistas agradables y una cama cómoda, pero notamos un leve olor a humedad que podría mejorar. La atención en recepción fue excepcional, especialmente de parte de Luís, quien fue muy amable y resolutivo.

La limpieza fue impecable y el desayuno, aunque básico, tenía lo suficiente para empezar bien el día. Sin duda, volvería sin dudarlo.

El hotel tiene una ubicación privilegiada, con acceso fácil al transporte y tiendas cercanas. La conexión Wi-Fi es buena, lo que se agradece cuando necesitas estar conectado.

El desayuno es bastante básico y el espacio para comer es demasiado pequeño, tienes que compartir mesa con otros. Las habitaciones son bastante pequeñas y hay un ruido notable del pasillo y comedor que puede afectar el descanso. En la habitación, el baño se siente muy apretado y la puerta chirría al abrirse. Además, los cojines de la cama lucen desgastados, lo que no da buena impresión. La correa de la persiana se rompió, pero fue reparada el mismo día.

Perfecto, perfecto, perfecto

La ubicación es simplemente espectacular, rodeado de lujo y cerca del centro. La decoración tiene ese encanto vintage que te hace sentir en otro tiempo. El desayuno es sencillo pero variado, ¡no te puedes perder los pasteles de nata!

Lo recomendaría 🥰🥰